
De los equipos de desarrollo de software a la fábrica de software escalable
Los ciclos largos de desarrollo ya no son asumibles por el mercado. Hoy la velocidad es un elemento imprescindible. Todavía más en el ámbito de las aplicaciones software. Una realidad que está transformando radicalmente el proceso de construcción de soluciones tecnológicas.
Los tradicionales equipos de desarrollo de software se están transformando en fábricas de software escalables que implantan un proceso industrial definible, repetible y medible en un entorno altamente productivo. Esta automatización reduce errores, pero, sobre todo, nos permite centrarnos en lo que realmente importa: la innovación orientada al negocio del cliente.
“Es la cultura, estúpido”
Esta frase, que habitualmente se utiliza hablando de economía, es una llamada de atención para resaltar la importancia de la interiorización de una determinada cultura de trabajo a la hora de afrontar los nuevos modelos de desarrollo de software. Se imponen los métodos colaborativos, los equipos distribuidos y las metodologías altamente adaptables y centradas en el cliente.
En Ikusi hemos incorporado las denominadas metodologías ágiles que nos ayudan en nuestro objetivo de adoptar una estrategia de desarrollo incremental, en lugar de la planificación y ejecución completa del producto. Estas metodologías ponen el énfasis en el empoderamiento de las personas para colaborar y tomar decisiones en equipo, en la planificación continua, en las pruebas permanentes… Son modelos de desarrollo colaborativo basados en frecuentes entregas incrementales e iterativas.
Esta forma de desarrollar software acorta los tiempos del Time to Market, agiliza y simplifica las actualizaciones y permite crear el software de forma muy cercana al cliente.
…Y esta transformación… ¿Para qué?
Hemos implantado una “fábrica de software” predecible y eficiente para construir aplicaciones digitales, hacerlas evolucionar y ponerlas a disposición de nuestros clientes, principalmente ciudades y aeropuertos. Ámbitos en los que tenemos un conocimiento de décadas, que sumado a nuestro conocimiento tecnológico y nuestra cultura de desarrollo de software nos permite ofrecer a nuestros clientes soluciones para mejorar la experiencia de sus usuarios y ciudadanos y, por supuesto, hacer más eficientes sus servicios y su gestión diaria.