La marca personal como aliada de la marca corporativa

Muchas veces tendemos a pensar que la marca personal y la marca corporativa discurren por caminos paralelos. Sin embargo, la marca personal constituye un importante activo para la creación de una marca corporativa potente.

Los expertos y consultores coinciden en que una de las tendencias en boga en el marketing actual es la humanización de las marcas. Somos humanos y tendemos a confiar más en las personas, en nuestros iguales, que en las corporaciones.

Por otra parte, hoy, como en ningún otro momento de la historia, tenemos a nuestro alcance plataformas de comunicación que nos permiten darnos a conocer de forma global, abordando tanto cuestiones personales como profesionales que van creando nuestra marca personal y un espacio específico y diferenciador en nuestro ámbito profesional.

En el ámbito corporativo las posibilidades de llegar a los clientes, partners e instituciones también se han multiplicado. A los tradicionales medios off-line se ha incorporado los medios on-line, multiplicando las herramientas de marketing a su alcance.

Pero en el contexto de la creciente importancia de la humanización de las marcas, esta cantidad y variedad no es suficiente. Cada vez son más las compañías que están poniendo en valor la marca personal de sus profesionales y su capacidad para generar visibilidad, dotar de credibilidad y fortalecer la marca corporativa. De esta forma la suma de las marcas personales de los profesionales de unas empresas se convierte en una forma adicional de llegar al público final.

El reto está en conjugar las potencialidades de ambas marcas. Crear un contexto en el que el profesional pueda potenciar su propia visibilidad alineándolo con los valores y la estrategia de la compañía.

Las empresas se están sumando a esta visión de la comunicación en la que los profesionales actúan como embajadores de la marca corporativa desde el impulso de su propia marca personal. A veces lo están haciendo de forma intuitiva, es cierto. Lo que pone de manifiesto que queda un trabajo que hacer desde los propios departamentos de Marketing y Comunicación para impulsar estrategias formales de comunicación que incorporen el desarrollo de la marca personal de sus profesionales a la comunicación corporativa de la empresa.